El 82% de la población europea apoya que las empresas no vendan productos que destruyen los bosques y un 78% considera que sus gobiernos deben prohibir aquellos que generan la deforestación.
Estos son algunos de los resultados de una encuesta realizada el pasado mes de julio en nueve países de la Unión Europea por la empresa de estudios de mercado Globescan para una amplia coalición de organizaciones de consumidores y conservacionistas, cuyos resultados ha publicado, coincidiendo con el Día de la Selva Amazónica, la Confederación de Consumidores y Usuarios.
La población europea cree que los agentes con más responsabilidad en la protección de los bosques son las que peor funcionan. Es el caso de las empresas, de las que el 46% de los encuestados espera que sean más responsables en la protección de aquéllos, mientras que un 64% piensa que son quienes tienen un comportamiento más negativo a la hora de evitar la deforestación.
En el caso de España, a la hora de señalar quién tiene la responsabilidad política ante esta cuestión, el 56% se decanta por las autoridades nacionales y el 50% pasa el testigo a las instituciones de la UE.
El Parlamento Europeo tiene previsto votar el próximo 13 de septiembre una ley que pretende garantizar a los consumidores que los productos que adquieren en la UE están libres de deforestación.
Redacción (Agencias)