La sequía está haciendo que sea necesario limitar el uso de agua para garantizar el consumo humano.
La sequía que azota España desde finales de 2021 no parece que vaya a parar por el momento. Es por ello que nuestro país se ve en la obligación de limitar el uso del agua para garantizar el consumo humano, sobre todo en Cataluña y Andalucía.
Algunas de las medidas más usadas para paliar esta sequía son las siguientes: restringir el riego de jardines, cortar el suministro de duchas en playas o prohibir el llenado de fuentes y piscinas.
Si tenemos en cuenta lo poco que está lloviendo este año 2023, los embalses se encuentran al 46,5% de su capacidad y almacenan aproximadamente 36.000 metros cúbicos. Con estos datos en la mano, estamos hablando de un 27,6% menos que la reserva hídrica media de la última década.
Zonas más afectadas
Las cuencas en peor estado son las de Guadiana, que roza casi el 30%, Guadalete-Barbate, con 22,4 puntos porcentuales, Guadalquivir, con un 23,1%, Cataluña, que alcanza los 30 puntos porcentuales y Mediterránea Andaluza (32,5%).
Redacción.